La bioseguridad y la bioprotección son temas que se han ganado un espacio en la atención del público general como consecuencia de epidemias que se han extendido más allá de sus compartimentos habituales, pandemias y otras amenazas globales a la salud todo ello salpimentado con la permanente espada de Damocles de un uso malicioso de los conocimientos para mejorar o dispersar patógenos letales con finalidades bioterroristas o criminales.

Hay muy pocas iniciativas que aborden la Bioseguridad y la Bioprotección en el ámbito universitario y menos aun las que permiten a los asistentes el trabajo básico en una unidad de alta contención biológica. Y esto es lo que ha tenido lugar las dos últimas semanas (entre el 27 de mayo y 7 de junio) en las instalaciones de IRTA-CReSA, dentro del módulo práctico de Biosafety & Biosecurity del máster Infectious Disease One Health (IDOH) Erasmus Mundus. Uno de los cuatro semestres del máster se celebra en la Universitat Autònoma de Barcelona y uno de los módulos, el que nos ocupa, es dirigido por personal de CReSA con la colaboración de un experto reconocido en la evaluación del riesgo, el Dr. Jurgen Mertsching, de la Facultad de Medicina de Hannover.

El módulo consistió en clases magistrales por la mañana, y actividades prácticas dentro de la Unitat de Biocontención, por la tarde. Por la mañana todas las lecciones se articularon alrededor en dos ejes principales: la  biocontención y bioseguridad asociada a las instalaciones por un lado y la avaluación de riesgos como una técnica o herramienta primordial en la gestión del riesgo biológico por el otro.

En lo que respecta a la biocontención y bioseguridad se habló de la categorización de los microrganismos en función de su efecto sobre seres humanos y animales; la descripción de los niveles de bioseguridad o contención y la relación entre estos y la categorización anterior; como hacer de forma segura el inicio de operaciones o el cierre de instalaciones de alta seguridad; procesos de inactivación; gestión de residuos sólidos, líquidos y gaseosos; transporte de material biológico infeccioso y sus categorías; equipos de protección individual (EPIs) y finalmente las particularidades de las instalaciones de alta contención que trabajan con grandes animales (por ejemplo, terneros, cerdos, cabras, ovejas, alpacas, llamas, etc.) en contraposición a los pequeños animales de laboratorio (rata, ratón, conejo, etc.)

Pero un elemento capital, una vez se “tiene” una instalación es la gestión del riesgo biológico y esto sólo se puede hacer de forma efectiva con una aplicación rigurosa pero flexible de la herramienta que es la evaluación de riesgo. Así, se habló de las diferencias entre bioseguretat y bioprotección, qué es exactamente una evaluación de riesgo, evaluaciones de riesgo aplicadas a laboratorios diagnósticos y de ámbito hospitalario, los experimentos de ganancia de función como ejemplo claro de la controversia entre evaluaciones de riesgo diversas, ejercicios prácticos de evaluaciones de riesgo en grupo sobre artículos Open Access ya publicados, y finalmente una descripción con discusión asociada del borrador casi definitivo de la 4a edición del Laboratory Biosafety Manual (LBM) de la Organización Mundial de la Salud, que parece a punto de ser publicado.

Sin embargo posiblemente el elemento diferencial de este máster es que permite a los estudiantes “trabajar” bajo continua supervisión dentro de una instalación de alta contención biológica. Bajo tutoría, aprenden los procesos de entrada y salida de la instalación, como ponerse correctamente los EPIs, el trabajo básico en cabina de seguridad biológica (CSB) y la mejora progresiva en su dexterity, la propagación de virus en cultivo celular, procesos de inactivación por detergentes, tampones de lisis de ácidos nucleicos, o térmicos, y como cuantificarlos por cultivo celular, la descontaminación de CSB, o como hacer frente a incidentes biológicos (simulación teatralizada) entre otros.

Un total de 22 alumnos de todo el mundo (Alemania, Australia, Bangladesh, Bélgica, Botswana, Brasil, Camerún, Egipto, Filipinas, Gran Bretaña, Iraq, México, Nepal, Nigeria, Pakistán, Portugal, USA…) han recibido esta formación que les permitirá enfrentarse a la bioseguridad o la biocontención con nuevos conocimientos y herramientas. Nunca podrán eliminar totalmente el riesgo, pero sí valorarlo en todas sus facetas, porque el riesgo “cero” obviamente no existe.

Pero esta, esta es toda otra historia.

Caso práctico y seguimiento de derrame biológico (simulación), mediante solución fluorescente.

Conoce algo más al autor de este post:

Francesc Xavier Abad

Cap de la Unitat de Biocontenció IRTA-CReSA. comentarisviruslents.org xavier.abad@irta.cat 

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